Hay momentos en la vida que quieres enmarcar, otros retractar,
otros olvidar. Pero cada uno de ellos forma partes de tu vida, forman partes de
tus alegrías, desilusiones, tristeza e ilusiones. No dudes nunca sobre tu
familia, puede que personas que pierdan sus padres piensen que sus amigos son
su familia, porque le dan esa ilusión para seguir hacia delante, seguir
viviendo. Puede que sea duro perder a unos padres, pero ¿Y si pierdes a un
amigo? ¿Y si, esa persona que dijo que nunca te iba a abandonar, ya no está en
tu vida, te dejo desnudo delante de todos, te dejo completamente solo? Ya no tendrás
a tu familia, ni la de sangre ni la de amor. La familia no se elige, pero los
amigos no tanto como pensamos. Ellos vienen y se van de nuestra vida. Pero si
llegaron a entran algún día en tu corazón era por alguna razón, para hacerte
daño, darte una lección o tan solo para alégrate la vida. Cuando alguien se va,
es duro aceptarlo como dejarlo ir. Pero es más duro tenerlo a tu lado sabiendo
que se quiere marchar. Quiere ser feliz, y esta vez después de 23 años viviendo
a tu lado, quiero serlo sin ti. Pues amar tanto a una persona, y tener que
dejarla marchar. Solamente por verla feliz, porque quieres que viva su vida,
con esa sonrisa contagiosa, aunque llores porque se marche, de un sitio nunca
se marchara, son los recuerdos que nos quedan de esas personas que se marchan,
de esas personas que no dicen nada y desaparecen. Amigos o Familia, siempre es
tu entorno el que influye en tus emociones. No este triste, ni sola, porque eso
no será así. Las cosas vividas siempre se quedaran en tu mente, te acuerdes o
no de ellas, las tendrás ahí y es por eso que cuando sin que te des cuenta,
estas andando hacia un lugar que te será desconocido pero en mente esos
recuerdos que te hacen feliz, y esa sonrisa encantadora saldrá de ti, y será natural.
Sonríe por todos esos momentos que han pasado juntos. Dado que algún día no podrás
vivirlo y todo tendrá su final, sonríe y vive el presente.